Normalmente, en la mayoría de los casos siempre solemos ir a visitar todo aquello que tenemos lejos de casa sin darle importancia a lo que tenemos cerca, y esto es lo que nos ha pasado con la Fageda de'n Jordà. Un bonito bosque que tenemos al lado de casa pero que hasta hoy, no habíamos visitado nunca.



Es cierto que habíamos leído en un montón de sitios que era un paisaje natural perfecto para ir a disfrutar pero nunca nos había dado por visitarlo. Así que ayer, cogimos furgo y manta y nos fuimos a visitarla. Hicimos noche allí, así por la mañana ya estaríamos temprano y nos ahorraríamos el fuerte calor de verano.

La fageda de'n Jordà es un sitio ideal para visitar en furgo ya que nada más llegar, podemos encontrar un parquing para caravanas y furgonetas para poder pasar allí toda la noche. En temporada baja no se paga, pero cuando llega la temporada alta si. Nosotros tuvimos la suerte de que el parquing fue gratuito ya que ellos consideran temporada alta a partir de agosto.

En las instalaciones podemos encontrar baños y unas mesas geniales para poder comer o cenar tranquilamente disfrutando del bonito paisaje que rodea todo aquello. Sin duda, es un sitio genial para ver porque las fotos no hacen honra a la tranquilidad y al aire puro que se respira allí.


Nada más dejar el coche al parking, hay una especie de caminito por el cual nos adentramos en el recinto de la Fageda, en él, a mano derecha hay una casita de información donde nos facilitarán unos mapas y nos explicarán los recorridos que podemos hacer. Uno de corto, por dentro de la Fageda y otro más largo que recoje los diferentes volcanes de la zona. Nosotros escogimos el corto ya que solo eran 35m a pie y el otro, son 4 horas.


Para adentrarnos en el bosque, tenemos que hacerlo a través de un  paso medio-subterráneo y de repente, nos encontraremos envueltos por unos árboles altísimos llenos de hojas verdes, y una sensación de paz y tranquilidad inmesa.  Solo hace falta bajar las pequeñas escaleras de piedra y empezar a disfrutar de unas vistas maravillosas.







Es espectacular poder adentrarte en el bosque y pararte a mirar cada pequeño detalle. Hay muchas zonas con un verde muy atractivo y en cambio, hay otras donde parece que el color se haya desaturado y se haya vuelto más gris. La verdad es que es una sensación muy rara a la vista pero que es preciosa al mismo tiempo.




Nosotros nos lo pasamos en grande y no descartamos el hacer otro viaje al lado de casa y disfrutar de la maravilla de los volcanes ya que esta vez no teníamos tiempo de hacer todo el recorrido, pero para la próxima, nos llevaremos la comida y disfrutaremos de un día entero en la zona volcánica de la garrotxa.


Sin duda alguna es un sitio recomendable cien por cien ya que hay parquing en el cual descansar tranquilamente, zona para comer, aseos y el paisaje es fantástico. Un sitio donde se puede ir con niños para que empiecen a tener el contacto con la naturaleza, además si lo preferís, también se puede hacer la ruta con caballos y carruajes.